¿Qué fue de …? Hurgando en la memoria.

¿Qué fue de Carlos, de Luis, de Ángel…? Como casi todo en este blog, esta pregunta se formula con intención. Se espera una respuesta por parte del lector, un comentario. A cambio se ofrece refrescar la memoria de quiénes estas lineas puedan significar algo.

El escenario es muy sencillo: un colegio, después otro, unos niños y mis recuerdos sobre todo aquello. En aquel colegio, el antiguo, el de mi primera infancia, había dos bandas. O eras de los buenos, de los listos, de los niños bien, de la banda de Luis… o eras de los otros. Yo procuraba estar con los buenos, pero el mal tiraba de mi poderosamente. Al final me sentía más a gusto con los malos. O quizá me aceptaban de mejor grado y yo me dejaba querer por los de Lorenzo Sereno y su lugarteniente Kiko. Luis también tenía su lugarteniente, Paco. (como corría el condenao…) ¿Chicas? No sé… no recuerdo a ninguna, con apenas cinco años no tenía ese tipo de inquietudes. Sí recuerdo en cambio el día en que la madre de Álvaro Paradinas nos dio de almorzar el en recreo y llegamos tarde a clase… me acuerdo de eso y de cómo escocía le regleta de madera que nos aplicaban en los deditos, puestos asi juntitos todos para arriba. El colegio era el Castuera, a principios de los 70, y de allí son mis primeros recuerdos. El cambió a otro colegio fue obligado. El Castuera, tan pequeño como mal dotado, tenía los días contados. Se construyó un nuevo centro para el barrio del Lucero para atender a una creciente demanda. Casi todos fuimos a parar al Colegio Público Hermanos Álvarez Quintero, un edificio de cuatro plantas, para el que habilitaron una de ellas totalmente diáfana, que hacía las veces de recreo. Allí, separados en dos clases, pasamos toda la infancia. Mis compañeros, a los que va dedicado este texto, saben de lo que hablo.

De algunos de ellos tengo más o menos noticias, o los he visto de vez en cuando. Sé dónde trabajan o si han tenido hijos. Hemos podido hablar y contarnos cómo nos fue… En cambio de otros, nunca supe nada más, perdimos el contacto. Qué lástima, tantos recuerdos juntos y luego nada. Me voy a permitir recordarlos por sus nombres, es la mejor forma de refrescar mi memoria.

El grupo de empollones estaba encabezado por Carlos González Fuentetaja, ¡qué cabeza la suya! Recuerdo que fue el único que sacó un 11 en un exámen de 10 preguntas. El profesor rompió el borrador de exámen que utilizaba para corregir y siguió haciéndolo con el de Carlos. Otros integrantes del grupo de los que tengo algunas noticias son Jose L. Andrino Rodríguez, Julio Aguirre Cabezas, Rafael Jimenez Zamora. formaban un buen cuarteto. Yo a veces me juntaba con ellos, pero también con Juan Meléndez Frutos , Miguel A. Montealegre (al que hace poco vi, después de 25 años), y otros muchos… Álvaro Paradinas, Ángel Marina Angulo, Angel Salinero, Pablo Nieto y su primo … En la otra clase dejé también buenos amigos y compañeros de juergas: Alberto Mejías Bajo, Javier Aguado, Ángel Torres, Lorenzo Sereno, Kiko, Luis Fernández Esteve y Paco … (como corría el condenao. Discúlpame no me salen ahora tus apellidos). ¿Chicas? Ahora sí había chicas… Y yo me fijaba especialmente en una, pero creo que ella nunca me vió a mi. En aquellos años conocí a Elena Cañizo Mateo y Begoña Martín Arenilla que eran inseparables. A Inmaculada Luna Ruiz, Raquel Nieto García y a Ana, otro grupito inseparable. A Teresa del Pozo Garrote, la hija del director Don Aníbal. A Charo y Cristina, también del grupito de Elena y Begoña… a Jacqueline, Gloria, Salva, Javier Ramírez Antiller y a Jesús Mas Carrero.

Y por supuesto de la otra clase a Merche, a Esther, a las mellizas Ana y Beatriz (…felicidades para el día 6), a Ángela, a Vicky. En fin, hay bastantes más nombres a medida que afloren los recuerdos. Para todos ellos y ellas va este mensaje. Y si os parece conveniente podéis contar qué fue de vosotros, cómo se llaman vuestros hijos, cómo ha discurrido vuestra vida…

…. Gracias